Hoy es un día importante en la carrera del madrileño David Mora, pues confirma la alternativa en la Monumental de Las Ventas, nada menos que en la Feria de San Isidro. Ofician como padrino y testigo, respectivamente, el también madrileño Miguel Abellán y el salmantino Pedro Gutiérrez “El Capea”. Fotografía de portadaAlfredo Arévalo
Miguel Abellán
Nació enMadrid, el 24 de septiembre de 1979.
Debut con picadoresVinaroz (Castellón), el 2 de febrero de 1997.
AlternativaAlicante, el 24 de junio de 1998.
Confirmación20 de mayo de 1999.
Estadísticas 2008Hizo el paseíllo en 30 ocasiones. Cortó 46 orejas y 5 rabos.
Desde que con dieciséis años ingresó en la Escuela Taurina de Madrid el único objetivo de Miguel Abellán Hernando ha sido alcanzar su sueño de ser figura del toreo. Hijo de “El maletilla de Oro”, su afición y ganas de ser alguien en la profesión quedaron patentes desde su época de novillero sin caballos, cuando logró ser el ganador del Concurso Nacional de Escuelas Taurinas. En su despedida como novillero en Las Ventas salió a hombros con tres orejas.
Pocos días después se hizo matador de toros, en Alicante. Actuó como padrino José María Manzanares y ofició de testigo Enrique Ponce. El toro de la ceremonia se llamó “Guitarra” y llevó el hierro de Alcurrucén. La confirmó en la Feria de San Isidro del año siguiente con toros de Samuel Flores. Desde esa fecha Abellán ha saboreado las mieles del triunfo pero también ha sufrido numerosos y graves percances, pues es de los diestros más castigados por los toros. Aún así, su casta y su raza de torero siguen dando que hablar cada vez que se viste de luces y, lejos de minar su ánimo, da la sensación de que de cada percance ha salido incluso más reforzado.
Hasta el momento su trayectoria profesional no ha tenido la regularidad suficiente como para figurar con asiduidad en los carteles de las grandes ferias. Madrid ha sido su feudo y a Las Ventas siempre ha salido a ‘vencer o morir’, protagonizando tardes muy relevantes, algunas de ellas épicas, como la de su salida en hombros en San Isidro 2000 o su gran faena a un toro de Gavira en 2004. Este año estrena apoderados en las personas de Jorge Manrique y Manolo Martín y de su mano espera, de una vez por todas, consolidar su nombre en la zona noble del escalafón.
"El Capea"
Nació enSalamanca, el 27 de agosto de 1979.
Debut con picadoresAlgeciras (Cádiz), el 22 de junio 2003.
AlternativaMálaga, el 16 de agosto de 2004.
Confirmación12 de mayo de 2006.
Estadísticas 2008Hizo el paseíllo en 18 ocasiones. Cortó 21 orejas y un rabo.
Hijo de “El Niño de la Capea”, de manos de quien se formó como torero en el campo salmantino, Pedro Gutiérrez Lorenzo no dio el paso definitivo de actuar como profesional hasta concluir sus estudios universitarios.
Después de tan sólo un año como novillero con caballos, tomó la alternativa en la feria de agosto de Málaga con su amigo Javier Conde de padrino y Julián López “El Juli” de testigo. El toro de la ceremonia se llamó “Lechón” y perteneció a la ganadería de Daniel Ruiz. La confirmó al año siguiente, en la Feria de San Isidro, de manos de David Fandila “El Fandi”, con Sebastián Castella como testigo. El toro de la confirmación se llamó “Carcelero” y lució la divisa de Garcigrande.
Durante su primera temporada como matador, el nuevo Capea hizo el paseíllo en 45 tardes, entre España y América, intentando cuajarse como torero. En 2006 acudió a mayor número de plazas de relevancia, con diferente suerte. A final de temporada finalizó su relación de apoderamiento con Fernando Lozano e inició una nueva etapa con Emilio Moreno, con quien cumplimentó en 2007 una temporada ascendente que, si bien no tuvo brillo en su paso por Sevilla y Madrid, remontó posiciones en plazas como Castellón, donde salió en hombros en la Corrida de Beneficencia, y Salamanca, siempre exigente con el joven Pedro, que lo vio salir triunfante en compañía de “El Fundi” y el mismísimo José Tomás.
La temporada del 2008 supuso un escalón más en su evolución con una seria actuación sin trofeos en la Feria de Fallas y un digno paso por la Feria de Abril, San Antolín en Palencia o la Monumental de Barcelona. Después de cumplimentar una brillante campaña en ruedos americanos, esta tarde afronta un compromiso que puede ser clave en el devenir de la temporada y en su carrera profesional.
David Mora
Nació enMadrid, el 5 de febrero de 1981.
Debut con picadoresMóstoles (Madrid), el 14 de septiembre de 2001.
AlternativaBorox (Toledo), el 31 de agosto de 2006.
Confirmación9 de mayo de 2009.
Estadísticas 2008Hizo el paseíllo en 14 ocasiones. Cortó 29 orejas y 3 rabos.
La carrera de David Mora Domínguez se ha ido fraguando y cociendo de manera lenta y pausada. Con una preparación a la antigua usanza, se sirvió en sus inicios de las capeas en los alrededores de la capital para adquirir el rodaje y los recursos necesarios delante del toro, de tal modo que no fue hasta los veinte años cuando se le presentó la oportunidad de debutar con los del castoreño, en Móstoles, para lidiar utreros de Felipe Navas junto a Juan de la Reina y Juan de la Vega.
Dos años después se presentó en Las Ventas con una novillada de Alejandro Vázquez que estoqueó en compañía de Mario Campillo y Sánchez Mora. Dio una vuelta al ruedo en el astado de su debut y resultó herido menos grave en su segundo enemigo. Su buena actuación se tradujo en varios paseíllos más en esta plaza en años venideros – fue uno de los novilleros más destacados de la Feria de San Isidro 2005 –pero sus oportunidades en otros cosos de relevancia fueron contadas, de tal modo que no fue hasta el 31 de agosto de 2006, en Borox, cuando Enrique Ponce le invistió matador de toros tras cederle el toro “Peludo” de Alcurrucén, en presencia de Sebastián Castella.
Sus actuaciones en estos años han sido medidas en número pero exitosas en su resultado y cada temporada ha supuesto una vuelta de tuerca en su preparación y consolidación de un concepto elegante y clásico, de asentada planta, limpio trazo y fino acabado. El pasado año se hizo oír en varias plazas de Madrid y Toledo y no desaprovechó la oportunidad que se le presentó en la feria de Albacete, donde acudió para sustituir a un compañero y se convirtió en una de las gratas sorpresas del ciclo. Tres años después de su último paseíllo regresa a Las Ventas para dejar constancia ante el público madrileño que ha crecido en oficio, capacidad y madurez.
Miguel Abellán
Nació enMadrid, el 24 de septiembre de 1979.
Debut con picadoresVinaroz (Castellón), el 2 de febrero de 1997.
AlternativaAlicante, el 24 de junio de 1998.
Confirmación20 de mayo de 1999.
Estadísticas 2008Hizo el paseíllo en 30 ocasiones. Cortó 46 orejas y 5 rabos.
Desde que con dieciséis años ingresó en la Escuela Taurina de Madrid el único objetivo de Miguel Abellán Hernando ha sido alcanzar su sueño de ser figura del toreo. Hijo de “El maletilla de Oro”, su afición y ganas de ser alguien en la profesión quedaron patentes desde su época de novillero sin caballos, cuando logró ser el ganador del Concurso Nacional de Escuelas Taurinas. En su despedida como novillero en Las Ventas salió a hombros con tres orejas.
Pocos días después se hizo matador de toros, en Alicante. Actuó como padrino José María Manzanares y ofició de testigo Enrique Ponce. El toro de la ceremonia se llamó “Guitarra” y llevó el hierro de Alcurrucén. La confirmó en la Feria de San Isidro del año siguiente con toros de Samuel Flores. Desde esa fecha Abellán ha saboreado las mieles del triunfo pero también ha sufrido numerosos y graves percances, pues es de los diestros más castigados por los toros. Aún así, su casta y su raza de torero siguen dando que hablar cada vez que se viste de luces y, lejos de minar su ánimo, da la sensación de que de cada percance ha salido incluso más reforzado.
Hasta el momento su trayectoria profesional no ha tenido la regularidad suficiente como para figurar con asiduidad en los carteles de las grandes ferias. Madrid ha sido su feudo y a Las Ventas siempre ha salido a ‘vencer o morir’, protagonizando tardes muy relevantes, algunas de ellas épicas, como la de su salida en hombros en San Isidro 2000 o su gran faena a un toro de Gavira en 2004. Este año estrena apoderados en las personas de Jorge Manrique y Manolo Martín y de su mano espera, de una vez por todas, consolidar su nombre en la zona noble del escalafón.
"El Capea"
Nació enSalamanca, el 27 de agosto de 1979.
Debut con picadoresAlgeciras (Cádiz), el 22 de junio 2003.
AlternativaMálaga, el 16 de agosto de 2004.
Confirmación12 de mayo de 2006.
Estadísticas 2008Hizo el paseíllo en 18 ocasiones. Cortó 21 orejas y un rabo.
Hijo de “El Niño de la Capea”, de manos de quien se formó como torero en el campo salmantino, Pedro Gutiérrez Lorenzo no dio el paso definitivo de actuar como profesional hasta concluir sus estudios universitarios.
Después de tan sólo un año como novillero con caballos, tomó la alternativa en la feria de agosto de Málaga con su amigo Javier Conde de padrino y Julián López “El Juli” de testigo. El toro de la ceremonia se llamó “Lechón” y perteneció a la ganadería de Daniel Ruiz. La confirmó al año siguiente, en la Feria de San Isidro, de manos de David Fandila “El Fandi”, con Sebastián Castella como testigo. El toro de la confirmación se llamó “Carcelero” y lució la divisa de Garcigrande.
Durante su primera temporada como matador, el nuevo Capea hizo el paseíllo en 45 tardes, entre España y América, intentando cuajarse como torero. En 2006 acudió a mayor número de plazas de relevancia, con diferente suerte. A final de temporada finalizó su relación de apoderamiento con Fernando Lozano e inició una nueva etapa con Emilio Moreno, con quien cumplimentó en 2007 una temporada ascendente que, si bien no tuvo brillo en su paso por Sevilla y Madrid, remontó posiciones en plazas como Castellón, donde salió en hombros en la Corrida de Beneficencia, y Salamanca, siempre exigente con el joven Pedro, que lo vio salir triunfante en compañía de “El Fundi” y el mismísimo José Tomás.
La temporada del 2008 supuso un escalón más en su evolución con una seria actuación sin trofeos en la Feria de Fallas y un digno paso por la Feria de Abril, San Antolín en Palencia o la Monumental de Barcelona. Después de cumplimentar una brillante campaña en ruedos americanos, esta tarde afronta un compromiso que puede ser clave en el devenir de la temporada y en su carrera profesional.
David Mora
Nació enMadrid, el 5 de febrero de 1981.
Debut con picadoresMóstoles (Madrid), el 14 de septiembre de 2001.
AlternativaBorox (Toledo), el 31 de agosto de 2006.
Confirmación9 de mayo de 2009.
Estadísticas 2008Hizo el paseíllo en 14 ocasiones. Cortó 29 orejas y 3 rabos.
La carrera de David Mora Domínguez se ha ido fraguando y cociendo de manera lenta y pausada. Con una preparación a la antigua usanza, se sirvió en sus inicios de las capeas en los alrededores de la capital para adquirir el rodaje y los recursos necesarios delante del toro, de tal modo que no fue hasta los veinte años cuando se le presentó la oportunidad de debutar con los del castoreño, en Móstoles, para lidiar utreros de Felipe Navas junto a Juan de la Reina y Juan de la Vega.
Dos años después se presentó en Las Ventas con una novillada de Alejandro Vázquez que estoqueó en compañía de Mario Campillo y Sánchez Mora. Dio una vuelta al ruedo en el astado de su debut y resultó herido menos grave en su segundo enemigo. Su buena actuación se tradujo en varios paseíllos más en esta plaza en años venideros – fue uno de los novilleros más destacados de la Feria de San Isidro 2005 –pero sus oportunidades en otros cosos de relevancia fueron contadas, de tal modo que no fue hasta el 31 de agosto de 2006, en Borox, cuando Enrique Ponce le invistió matador de toros tras cederle el toro “Peludo” de Alcurrucén, en presencia de Sebastián Castella.
Sus actuaciones en estos años han sido medidas en número pero exitosas en su resultado y cada temporada ha supuesto una vuelta de tuerca en su preparación y consolidación de un concepto elegante y clásico, de asentada planta, limpio trazo y fino acabado. El pasado año se hizo oír en varias plazas de Madrid y Toledo y no desaprovechó la oportunidad que se le presentó en la feria de Albacete, donde acudió para sustituir a un compañero y se convirtió en una de las gratas sorpresas del ciclo. Tres años después de su último paseíllo regresa a Las Ventas para dejar constancia ante el público madrileño que ha crecido en oficio, capacidad y madurez.
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