martes, 16 de agosto de 2011

MÁLAGA-FERIA DE AGOSTO. Video y crónica de la Corrida de Toros Mixta (5ª Abono), lunes 15 de agosto




MÁLAGA-FERIA AGOSTO 2011. GANADERÍA: Se lidiaron cuatro toros de La Quinta y otros dos de Fermín Bohórquez. Encierro bien presentado en líneas generales. Primero y cuarto, de Bohórquez, eran algo parones pero al final dieron juego al rejoneador. Segundo, astifino y sin transmisión. El tercero, mucho recorrido, era noble y humillaba. El quinto, complicado pero servible. El sexto, con transmisión. TOREROS: Manuel Manzanares (rejoneador), con chaquetilla gris. Rejón desprendido (palmas). Bajonazo y nueve descabellos (saludos). Julián López 'El Juli', de grana y oro. Estocada caída y trasera (palmas). Dos pinchazos hondos. Estocada trasera y tendida (palmas). José María Manzanares, de azul eléctrico y oro. Estocada tendida (Una oreja). Pinchazo hondo y estocada caída (ovación). Incidencias: Quinta de abono. Casi lleno de la plaza. Calor al comienzo del festejo. Curro Javier, Luis Blázquez y Juan José Trujillo, de la cuadrilla de Manzanares, se tuvieron que desmonterar al parear a los dos lotes del alicantino.
Reproducimos la crónica de Dª Marta Jiménez realizada para malagahoy.com

Pensar que se pueden trazar estrategias antes de una corrida de toros, va en contra del credo taurino. Pero una vez metidos en faena, y nunca mejor dicho, sí se puede estar en el sitio justo en el momento adecuado. Y eso hizo ayer Manzanares. Moverse adecuadamente para que la tarde no quedara en tablas. Era un duelo de titanes. Amigos fuera del ruedo, pero atlantes del escalafón.
Julián López El Juli no llegó a ilusionar con el capote ante un toro que había que saber entender y sin ninguna transmisión. El silencio ensordecía mientras se esperaba el desenlace de todo lo que podía pasar en el ruedo. La impresión de los espectadores tras un traspiés del madrileño al pisar la muleta fue lo único que rompió el recogimiento. El toro no beneficiaba el lucimiento, no olvidar que se lidiaban toros de La Quinta, pero El Juli lo templó con gran sapiencia. No se cruzó demasiado en sus tandas pero con elegancia, al ritmo del toro y sin perder el mando, enlazó buenas series, demostrando torería, pero que apenas transmitían. Al entrar a matar, una estocada caída y palmas. El toro fue pitado durante su arrastre.
Ante su segundo, El Juli, si dejó mejores estampas con el capote en el recibo. Con la muleta comenzó directamente por naturales y con la izquierda construyó una tanda no demasiado extensa. Ya con la mano derecha, no se cruzó un sólo pase y abusó del perfil. Dió por acabado y por imposible un toro que tenía visos de servir para algo más. Dos pinchazos hondos y estocada trasera y hundida. Saludos para despedirse de una afición que esperaba algo más.
Fue el propio José María Manzanares, el que lanzó el guante hace meses, cuando al recoger el Estoque de Plata se apuntó a la corrida de La Quinta en La Malagueta. Y cumplió con creces el reto. Al recibir con su capote al primero, el diestro conectó con el toro y el dio muestras de que sus intenciones eran buenas. Aunque en el caballo el toro no quería mucha lucha en la muleta entró muy bien. Se lo llevó a los medios con grandes esperanzas que dieron sus frutos. Con la derecha dio una buena tanda que hizo saltar las alarmas entre el público, para bien, por supuesto. El toro tenía mucha transmisión, entraba muy bien a los engaños y Manzanares sabía que tenía una gran oportunidad por delante. Por naturales la tendencia al éxito siguió al alza.
Hizo gala de su inteligencia y supo bien cuando dejar respirar al toro para que no se apagara y hace seguir destilando los beneficios de la faena. Prolongó la tanda de manera suave y sabiendo lo que hacía y lo que podía llegar a ser. Y fue una oreja tras una estocada un poco tendida. Fue lo que le privó de un segundo trofeo aunque el público lo reclamó fervientemente. La pitada al palco presidencial casi resonó más que los olés.
En su segundo toro, el alicantino también dio muestras de que quería salir de La Malagueta con los deberes hechos. En esta ocasión, el toro quizá no era tan bueno como el anterior pero no por eso no lo aprovechó. Se lo brindó al que fuera toreo, y ahora su banderillero, Juan José Trujillo. Se veía que estaba disfrutando, pero en esta ocasión su faena no caló. No mató bien, pero ya había dejado lo mejor.
A pesar de la creencia mayoritaria, la corrida de ayer no era un mano a mano. Abría cartel, el menor de los Manzanares. Manuel se presentaba en La Malagueta y se quedó en eso, en presentación. Una cuadra fantástica de Pablo Hermoso de Mendoza que favoreció lo poco aceptable que dejó en el ruedo. En sus dos toros, de Fermín Bohórquez, demostró que aún le faltan plazas por recorrer. Tal y como reconocía ayer a este periódico, ilusión no le falta y posiblemente gracias a ella consiga el punto que le falta. Eso sí, se le agradece la ausencia de alardes vacíos. No brilló, pero el triunfo se quedó en casa. En casa de los Manzanares, claro.
En la crónica que realiza D. Daniel Rojo para nuestros amigos del blog MALAKA TAURINA, él termina su crónica haciendo esta acertada observación:
"Y esta era una de las “supuestas” corrida toristas del abono y que curiosamente, ¡ojo al dato!, se aplaudieron a los picadores por no picar. No obstante esto era lo que se podía esperar de una corrida “torista de Málaga” que vino a menos, para empezar, poniendo por delante a un rejoneador y que luego se remató con los ¿toros? que saltaron al ruedo de la Malagueta y que el Señor Presidente Ildefonso nunca debió aprobar. Por muchas presiones que venga de Roberto Domínguez o pepito de los palotes. Así no, Ildefonso. ¡¡Hágase notar y ejerza como lo que es, Autoridad del festejo!!"

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