Toros de Vinhas, desiguales de presentación, nobles y con movilidad.
ANTONIO RIBEIRO TELLES: Vuelta y saludos;
HERMOSO DE MENDOZA: Vuelta y vuelta;
MANUEL TELLES BASTOS: Vuelta y vuelta.
Entrada: Casi lleno.
La enorme expectación suscitada para la tercera corrida del abono de Campo Pequeno no defraudó. Los toros de Vinhas, serios, resultaron colaboradores, embistiendo con franqueza.
Hermoso de Mendoza demostró que en Lisboa se encuentra como en casa. Desde el comienzo sintió el cariño del público y el navarro puso todo de su parte para alcanzar un triunfo más en Portugal. Tardó poco en acoplarse a la velocidad del segundo toro, construyendo una faena de menos a más, en la cual destacaron las espectaculares suertes cambiadas. Pero el gran Pablo surgió en el quinto, sobre todo al utilizar a "Chenel" para demostrar la máxima virtud de su estilo, donde se combina el rejoneo español con algunas raíces del toreo a la portuguesa. Esa mezcla fascinante de brega sin fisuras y varios lances de frente levantó a los espectadores de sus asientos.
Antonio Ribeiro Telles diseñó una brillante faena de maestro ante el que rompió plaza. Toreó con verdad rematando las suertes en alardes de poderío. Sumó una lección más de toreo ecuestre a su largo magisterio. Frente al cuarto, no repitió el éxito.
Manuel Telles Bastos dio un nuevo toque de atención. Acartelado entre las grandes figuras, no le vino grande la tarde, sobreponiéndose a las dificultades del peor lote. Las dos lidias tuvieron un corte similar, muy personal, además de imprimir calidad estética a todo lo que hizo.
Los Forcados Amadores de Évora pegaron el primero al primer intento por intermedio de Ricardo Casas-Novas, que si no estuvo muy bien en la cara del toro, tuvo mérito por querer consumar la pega; João Pedro Oliveira sintió muchas dificultades para consumar la pega del tercero, lográndolo, apenas, al cuarto intento y el cabo, António Alafacinha, cerró la actuación del grupo que dirije con una pega perfecta al quinto de la noche.
El Grupo do Aposento da Moita pegó al primero con Tiago Ribeiro en la cara, que estuvo excelente, reculando hasta que el toro metiera la cara; «Mata»protagonizó una pega muy vibante al tercero y Nuno Inácio consumó también al primer intento la pega del último.
Antes de iniciarse la corrida, se rindió homenaje a una figura histórica del toreo ecuestre, Don Francisco de Mascarenhas, quién hizo su presentación en la Monumental de Lisboa hace setenta y cinco años.
Fuente: aplausos/fotos: Joao Silva
No hay comentarios:
Publicar un comentario