Pase de pecho de José Tomás.Apf
Coliseo de Nimes. Domingo, 18 de septiembre de 2011. Penúltima de feria.
Lleno de "no hay billetes". Toros de Jandilla y uno (3) con el hierro de Vegahermosa; serios, con distintos remates y líneas; pronto, vivo y encastado, de mejor inicio de muletazo que final soltando la cara; tardo el 4; templado y de justo fuelle el 5; extraordinario el 6, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre; 1 y 2 se lesionaron; un sobrero de Parladé (1 bis), sin fuerza y vacío; otro sobrero de Parladé (2 bis), noble y bueno por los dos pitones;
Javier Conde, de verde esperanza y oro. Pinchazo, media estocada y descabello. Aviso (silencio). En el cuarto, media estocada pasada y atravesada y descabello. Aviso (silencio).
José Tomás, de rioja y oro. Estocada pelín ladeada (dos orejas). En el quinto, estocada tendida y descabello. Dos avisos (oreja). Salió por la Puerta de los Cónsules.
Thomas Duffau, de caldero y oro. Media estocada caída (silencio). En el sexto, espadazo (dos orejas).
Reproducimos la crónica del Sr.Zabala de la Serna, para abc.es, sobre este festejo:
José Tomás corta tres orejas y sale por la puerta de los cónsules
El ambientazo desbordaba las piedras de siglos de Nimes. La ovación al romper el paseíllo hacia José Tomás la compartieron Javier Conde y Thomas Duffau, que confirmaba alternativa. La mala suerte quiso que el primer toro de Jandilla, una tacazo de hechuras, con plaza y los pitones por delante, saliese descoordinado. Una lesión medular que fue a más en los primeros capotazos y movimientos. La devolución marcó el camino de vuelta. La zona parcheada de serrín del burladero de matadores tampoco ayudaría. Había llovido por la noche y el ruedo lucía a manchas claras.
El sobrero de Parladé, un zapato de bajo, no podía ni con la penca del rabo. Duffau lo saludó en términos mixtos de lances y chicuelinas. Y quitó por alto. La ceremonia de la confirmación fue con un toro muerto de antemano. Se agradeció la brevedad. Llovía.
El toro de Javier Conde se partió el pitón derecho casi por la mitad al enterrarlo en el ruedo. Sonó como una rama seca y apenas sangró. El segundo sobrero también era de Parladé. Conde le dio dos puyazos en firme. José Tomás se echó entonces el capote a la espalda. Los pitones pasaron a milímetros a milímetros de la taleguilla, poniendo el valor la belleza de la emoción. Cuando Javier Conde se disponía a brindar a la autoridad, lo que se dice pedir permiso, se le arrancó el toro de improviso y, tras un amago de salvar la situación y descomposición, Conde improvisó unos naturales en los que el de Parladé demostró su condición. Serían a la postre los mejores muletazos de la faena. Volvió JC a iniciar la faena desde 0, probando el toro y con desigualdad sobre la mano derecha. Entre tirones y aperturas, alguno fue bueno. Tardó en volver a coger la izquierda inexplicablemente. Y cuando lo hizo abrió mucho la embestida franca. Cambió la muleta, surgió un desarme y nada cobró el vuelo debido para tan buen ejemplar.
Una hora después del inicio de la mañana sonó la hora de José Tomás. Las verónicas de enorme empaque sirvieron de carta de presentación. El toro de Vegahermosa contó con cosas muy a su favor: la viveza, la fijeza, la repetición y la prontitud. Y una en su contra: que soltaba la cara en los finales de muletazo. O la falta de clase. JT dibujó la belleza ordoñista rodilla en tierra que desembocó en un cambio de mano acongojante. El planteamiento de faena tuvo un principio diestro con los terrenos demasiado escorados hacia toriles, la muleta por abajo intentando esquivar el tornillacito último, que no siempre, y la quietud por bandera. Un desarme sirvió para que José Tomás a la vuelta cambiara hacia terrenos más centrados. Y allí la izquierda interpretó dos tandas ligadas y de menos a más ambas, floreadas con molinetes zurdos y pases de pecho y un muletazo con el reverso. El jandilla Vegahermosa se arrancaba con fijeza pasmosa, pero ese último tranco de suelta cara le llevó a José Tomás a buscar las roblesinas de vaciar por arriba. Eso y que últimamente las ha incorporado a su repertorio. El Coliseo bramó más que en todo lo anterior de limpieza desigual. A pies juntos los naturales si tuvieron la nitidez, y el abandono, que no ponía la encastadita embestida. Las manoletinas de compás abierto pusieron el colofón a una faena que se igualó por la espada. Por fin cayeron las dos orejas deseadas, anheladas y exigidas. ¿Contentos todos? Javier Conde en el cuarto de tarda respuesta estuvo en un mar de dudas. Llovía. Y el hombre se quitó las zapatillas.
A pies juntos saludó José Tomás al altón quinto tal y como había quitado por delantales al anterior toro de JC. Temple tenía el jandilla por encima de humillación. JT lo interpretó perfecto a su altura con despaciosidad y encaje en dos tandas de dormidos redondos. Al natural, más por abajo, muy puro, el viejo reloj de Nimes paró sus agujas. Sobre todo cada segundo natural de serie tan soberbiamente colocado. José Tomás esperó al toro cuando le costaba pasar, con el fuelle gastado, y le vació pases de pecho de aguante y lento tempo. Por su ya escasa vida, los medios muletazos diestros fueron idóneos para aprovechar el ya corto viaje. Otra especie de roblesinas que no le van, pero... El cierre por alto más torero y una estocada tendida de efectos retardados por su trayectoria. Tanto que se oyó el segundo aviso con el jandilla tragándose la muerte. Otra oreja. Puerta de los Cónsules.
Thomas Duffau sorteó un extraordinario 'Zurrapero' en sexto lugar, un toro un punto basto pero con un tranco y un ritmo fabulosos. La templanza sostenida en su embestida. Una bravura tamizada de lujo. Duffau arrancó por pases cambiados en una faena sobre la base de los arrestos más que la calidad. Intermitente a veces desde el deseo y la juventud en cogerle al aire al gran toro. Unas apretadísimas bernadinas finales y un espadazo le auparon con los trofeos. El toro fue bravo hasta para morir. El premio de la vuelta al ruedo en el arrastre hizo justicia a su entrega.
Acabó felizmente bajo la lluvia lo que tan malamente había empezado. JT, al octavo día, consumó la salida a hombros. Esto sólo es el final del principio...
Videoresumen:
José Tomas est sorti ce matin par la Porte des Consuls de Nîmes en coupant trois oreilles, deux à son premier Jandilla et une à son second. Il est sorti sur les épaules tout comme le torero landais Thomas Dufau qui coupe deux oreilles au terme une excellente faena, pleine d'entrega au sixième. Vidéo du triomphe de Thomas Dufau à venir.
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