Reproducimos este post que aparece en el Blog de Agustín Hervás y que no tiene ni una pizca de desperdicio. Lo del Sr. Puche carece de calificativos.
La inclusión en la pasada feria de Málaga de dos corridas nocturnas produjo perplejidad entre la afición, que no entendía cómo la empresa de Puche las había programado tan solo habiendo dado la explicación de: “¿Y porqué no? Las de otros años habían funcionado”. La afición sospechó de primera hora en dos posibles argumentos, que jamás la empresa confirmó. El primero relativo al cumplimiento mínimo del pliego con respecto de los espectáculos a dar en feria, habiendo ya confeccionado los carteles con otras fechas, teniendo que meter estos dos con calzador. Y el segundo, más sustentado, amén de ser una idea de marketing innovadora, la de formar paquete de pernoctación. Se adquiría la corrida de Tomás y una jornada doble, bien el viernes, o bien el sábado. Luego las nocturnas resultaron pesadas en lo artístico y cansinas en lo físico, no solo para los asistentes sino también para los profesionales que de alguna forma teníamos que ver con el espectáculo. Para los periodistas nuestras crónicas no pudieron servirse a tiempo, para los operarios de la plaza un trasiego estresante y para los equipos gubernativos, quizás, un caos.
Para el estado presidencialista al que el reglamento Soriano ha sometido la fiesta en Andalucía, el caos ha sido tal, en esas dos jornadas malagueñas con doble función, que hasta se hubieran podido cometer irregularidades que algún sufridor ganadero ha calificado como de despóticas.
No es usual en los presidentes y equipos gubernativos nacidos en la época del Reglamento de Andalucía, que se argumente despotismo presidencial por la sencilla razón de que esta norma contribuyó en gran medida al amiguismo que tapa todo y calla todo. Sin embargo, Rafael Ruiz, representante de la ganadería de Jaralta opina que los equipos gubernativos en estos momentos, a cuatro años del estreno del reglamento “no tienen muy clara su misión”.
Rafael Ruiz, como representante de Jaralta, ha sido un afectado de ese caos administrativo producido en la pasada feria malagueña. Y como consecuencia, el ganadero titular, Santiago Muñoz, redactó y presentó una denuncia ante el organismo que dirige María Gámez, contra el equipo gubernativo que comandaba Ana María Romero, el día de autos.
Afirma Ruiz que la denuncia “no es una cuestión personalizada contra nadie y mucho menos contra la presidenta”
A fecha de hoy el redactor y denunciante señor Muñoz pondera reclamar a la autoridad la contestación que aún le deben.
Con un argumento convincente Rafael Ruiz, que además ejerce de veterinario, me hace saber que: “El reglamento tiene unos procedimientos del reconocimiento que en nuestro caso no se siguieron”
Y explica: “La corrida llegó a los corrales de La Malagueta, a las seis de la mañana del miércoles 19 de agosto, se desembarcó a las 9 de la mañana y se reconoció a las 13 horas, el primer documento que llega a nosotros con el resultado del reconocimiento fue el mismo día que se lidiaba, a las 20 horas”.
Debe saberse que los artículos reglamentarios a los que el representante de Jaralta se refiere son los que van del 35 al 39 que trata de las reses rechazadas.
.- No se nos dijo el motivo del rechazo de nuestros toros, ni nada, para que hubiéramos podido decidir si nos íbamos o nos quedábamos. En fin, decidir. Allí daba la impresión de que el equipo no quería perjudicar a la empresa, por eso decidieron media hora antes y decidieron meter dos toros de Carlos Nuñez, que estaban por debajo de los nuestros”.
Rafael Ruiz cuenta esto con serenidad pero con la firmeza de la razón. Sin embargo cambia el tono del discurso cuando se refiere a lo que él califica como despotismo.
.- Oiga que en este país tenemos ya muchos años de democracia y que aquellos tiempos ya pasaron. Que ningunearon al mayoral. Que no tuvieron elegancia. Que quisieron echar al mayoral de los corrales. Que tuvieron allí tres días los toros. Que nos hicieron tres pesadas absurdas. Que si era culpa de la bascula, que hubieran reparado la báscula, a nosotros no nos importaba eso. En fin le repito que esta denuncia no es contra Ana María Romero ni nadie del equipo de forma personalizada, es contra todo el equipo por lo que ya le he dicho, no se cumplió el procedimiento que marca el reglamento para el reconocimiento de nuestros toros. Y esta denuncia debe servir como un tirón de orejas a todos.
.- Rafael – le pregunto – ¿ Le importa que lo cite en el artículo?
.- No, por supuesto que no, sólo que evite algunos tacos que he dicho.
.- No se preocupe. Que haya suerte para esta tarde.
Jaralta lidiaba la tarde del 25 de septiembre en Pozoblanco. La corrida de Málaga se celebró el 21 de agosto por la noche, se lidiaron 4 y dos de Carlos Núñez. La mataron Mari Paz Vega. Antonio Barrera y Joselito Ortega al que le echaron un toro al corral.
Para el estado presidencialista al que el reglamento Soriano ha sometido la fiesta en Andalucía, el caos ha sido tal, en esas dos jornadas malagueñas con doble función, que hasta se hubieran podido cometer irregularidades que algún sufridor ganadero ha calificado como de despóticas.
No es usual en los presidentes y equipos gubernativos nacidos en la época del Reglamento de Andalucía, que se argumente despotismo presidencial por la sencilla razón de que esta norma contribuyó en gran medida al amiguismo que tapa todo y calla todo. Sin embargo, Rafael Ruiz, representante de la ganadería de Jaralta opina que los equipos gubernativos en estos momentos, a cuatro años del estreno del reglamento “no tienen muy clara su misión”.
Rafael Ruiz, como representante de Jaralta, ha sido un afectado de ese caos administrativo producido en la pasada feria malagueña. Y como consecuencia, el ganadero titular, Santiago Muñoz, redactó y presentó una denuncia ante el organismo que dirige María Gámez, contra el equipo gubernativo que comandaba Ana María Romero, el día de autos.
Afirma Ruiz que la denuncia “no es una cuestión personalizada contra nadie y mucho menos contra la presidenta”
A fecha de hoy el redactor y denunciante señor Muñoz pondera reclamar a la autoridad la contestación que aún le deben.
Con un argumento convincente Rafael Ruiz, que además ejerce de veterinario, me hace saber que: “El reglamento tiene unos procedimientos del reconocimiento que en nuestro caso no se siguieron”
Y explica: “La corrida llegó a los corrales de La Malagueta, a las seis de la mañana del miércoles 19 de agosto, se desembarcó a las 9 de la mañana y se reconoció a las 13 horas, el primer documento que llega a nosotros con el resultado del reconocimiento fue el mismo día que se lidiaba, a las 20 horas”.
Debe saberse que los artículos reglamentarios a los que el representante de Jaralta se refiere son los que van del 35 al 39 que trata de las reses rechazadas.
.- No se nos dijo el motivo del rechazo de nuestros toros, ni nada, para que hubiéramos podido decidir si nos íbamos o nos quedábamos. En fin, decidir. Allí daba la impresión de que el equipo no quería perjudicar a la empresa, por eso decidieron media hora antes y decidieron meter dos toros de Carlos Nuñez, que estaban por debajo de los nuestros”.
Rafael Ruiz cuenta esto con serenidad pero con la firmeza de la razón. Sin embargo cambia el tono del discurso cuando se refiere a lo que él califica como despotismo.
.- Oiga que en este país tenemos ya muchos años de democracia y que aquellos tiempos ya pasaron. Que ningunearon al mayoral. Que no tuvieron elegancia. Que quisieron echar al mayoral de los corrales. Que tuvieron allí tres días los toros. Que nos hicieron tres pesadas absurdas. Que si era culpa de la bascula, que hubieran reparado la báscula, a nosotros no nos importaba eso. En fin le repito que esta denuncia no es contra Ana María Romero ni nadie del equipo de forma personalizada, es contra todo el equipo por lo que ya le he dicho, no se cumplió el procedimiento que marca el reglamento para el reconocimiento de nuestros toros. Y esta denuncia debe servir como un tirón de orejas a todos.
.- Rafael – le pregunto – ¿ Le importa que lo cite en el artículo?
.- No, por supuesto que no, sólo que evite algunos tacos que he dicho.
.- No se preocupe. Que haya suerte para esta tarde.
Jaralta lidiaba la tarde del 25 de septiembre en Pozoblanco. La corrida de Málaga se celebró el 21 de agosto por la noche, se lidiaron 4 y dos de Carlos Núñez. La mataron Mari Paz Vega. Antonio Barrera y Joselito Ortega al que le echaron un toro al corral.
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