miércoles, 10 de agosto de 2011

«Me molesta que llamen suicida a José Tomás y que le acusen de no tener arte»






En la foto:Miguel
Gijón, I. PELAEZ
Miguel Díaz-Negrete sigue con su asiento en el balconcillo de grada del tendido 3. Entre su resguardo del abono de 1958 hasta el de 2011, que muestra orgulloso, pasan faenas y mucha tauromaquia. A sus 91 años cuenta, con total lucidez, vivencias relacionadas con la plaza de toros de El Bibio cuya reconstrucción realizó su padre, también arquitecto. Claro y conciso, forma parte de la historia viva de la plaza.


-Después de tantos años, tendrá anécdotas. -Quisieron poner un funambulista en la plaza de toros. Yo pregunte qué querían hacer y me dijeron: enganchar un cable de una parte a otra de la plaza. Les comenté que si querían tirar la plaza, porque en cuanto se ponga en la parte media del cable se venía todo abajo. Entonces lo que hicimos fue engancharlo a dos edificios. Salió bien. -A lo largo de tantos años, ¿qué ha cambiado? -He visto de crío, en Madrid, recuerdo con 10, 12 años, la plaza de toros sembrada de caballos que luego volvían a coser para sacarlos. He visto picar sin peto. Todos los tercios han cambiado. -¿Qué espera de la nueva feria? -Tiene que mejorar. Hay que renovar siempre más, con los más jóvenes. Me parece bien lo de Juan del Álamo, que estuvo bien de novillero aquí. -¿Cuál sería el mejor cartel a lo largo de la historia? -Es muy difícil. Cambia todo, las técnicas, todo. Manolete y Perera son distintos. Personalmente, tengo toreros por épocas. Sentí pasión por Marcial Lalanda; me encantó Domingo Ortega. Disfruté con Manolete. Con Pepe Luis Vázquez, con Paco Camino, que era un torero con una categoría importante. -¿Qué opina de José Tomás? -Me molesta que le llamen suicida y que le acusen de no tener arte. Es absurdo que digan que quiere morir en una plaza. Le gusta arriesgar y entrar en el terreno del toro. Es surrealista que no aprecien eso y luego les encanten las banderillas del Fandi. A mí me gusta mucho, como también me gusta Perera. Toreros que arriesgan y luchan por sacarle partido al toro. -¿Cree que se prohibirán los toros? -Me parece disparatado. Ha sido una fiesta toda la vida y ahora llega un grupito que protesta. Mire usted, proteste contra cosas más importantes, como el aborto, o la eutanasia. Fuente: lne.es

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