Jiménez y 'Vicioso', el 5º y mejor novillo de la tarde, se emplean en un lance afarolado con el capote. (Manuel Sagüés)
LOS NOVILLOS l Ganaderías. Tres utreros de Juan Pedro Domecq (1º, 3º y 5º) y otros tres de Toros de Parladé, todos de la misma casa ganadera. Correctos de presentación, sobresaliendo el 1º. Encierro con gran nobleza y clase, pero muy escaso de fuerza. El más completo y con mayor gas fue el 5º.
LOS NOVILLEROS l Víctor Abad. Media atravesada y 4 descabellos (saludos tras aviso). Y pinchazo y estocada (saludos). l Javier Jiménez. Estocada atravesada (2 orejas tras aviso). Y pinchazo, estocada corta cruzada y 3 descabellos (saludos tras aviso). l Jesús Duque. Estocada (oreja). Y estocada caída (oreja).
LAS GRADAS l Incidencias. Presidencia generosa de Ignacio Madorrán. Medio aforo. Veraniego. Jiménez brindó un novillo al alcalde por la muerte del día 2.
LODOSA. Aire de condolencia, convertido en muchos pasajes de la lidia en maestrante, se respiró en el tercer festejo de la feria por la muerte, todavía caliente en los labios de los lodosanos, de Félix De Luis en el encierro del martes. En tan equilibrado como sereno silencio se pudo disfrutar de una entretenida novillada picada de las que resultaron triunfadores Javier Jiménez y Jesús Duque. Ambos se repartieron cuatro orejas y salieron a hombros del recio coso de la villa pimentorena. Víctor Abad, el menos rodado de la terna, se conformó con otras dos generosas ovaciones recogidas desde el tercio.
Las palabras entretenido, triunfo, orejas... son las que, normalmente, se destacan y se habrán destacado en los comentarios del público feriante y en las reseñas licuadas de Internet. Y es verdad, mas habría que completar que los utreros de las casas ganaderas de Juan Pedro Domecq tuvieron más de invalidez que de bravura y calidad. La verdadera emoción de la fiesta, en la que casa la acometida brava y encastada del toro y el engaño sincero y profundo del torero, tuvo su momento en el comienzo de faena de muleta entre Vicioso, el 5º de la tarde, y el rubiales Javier Jiménez. Acoplamiento que puso a todo el mundo de acuerdo y que llevaba como tarjeta de presentación el brindis que el chaval de Espartinas formuló como pésame por Félix de Luis a todo Lodosa a través de su alcalde, Pablo Azcona. Lo mejor de la tarde lo estropeó Jiménez con la espada. El resto del festejo deparó puestas en escena cómodas por la boyantía y escaso motor de los animales corridos. Con una oreja para Jiménez del 2º, el resultado de la emoción hubiese sido más justo.
LOS NOVILLEROS l Víctor Abad. Media atravesada y 4 descabellos (saludos tras aviso). Y pinchazo y estocada (saludos). l Javier Jiménez. Estocada atravesada (2 orejas tras aviso). Y pinchazo, estocada corta cruzada y 3 descabellos (saludos tras aviso). l Jesús Duque. Estocada (oreja). Y estocada caída (oreja).
LAS GRADAS l Incidencias. Presidencia generosa de Ignacio Madorrán. Medio aforo. Veraniego. Jiménez brindó un novillo al alcalde por la muerte del día 2.
LODOSA. Aire de condolencia, convertido en muchos pasajes de la lidia en maestrante, se respiró en el tercer festejo de la feria por la muerte, todavía caliente en los labios de los lodosanos, de Félix De Luis en el encierro del martes. En tan equilibrado como sereno silencio se pudo disfrutar de una entretenida novillada picada de las que resultaron triunfadores Javier Jiménez y Jesús Duque. Ambos se repartieron cuatro orejas y salieron a hombros del recio coso de la villa pimentorena. Víctor Abad, el menos rodado de la terna, se conformó con otras dos generosas ovaciones recogidas desde el tercio.
Las palabras entretenido, triunfo, orejas... son las que, normalmente, se destacan y se habrán destacado en los comentarios del público feriante y en las reseñas licuadas de Internet. Y es verdad, mas habría que completar que los utreros de las casas ganaderas de Juan Pedro Domecq tuvieron más de invalidez que de bravura y calidad. La verdadera emoción de la fiesta, en la que casa la acometida brava y encastada del toro y el engaño sincero y profundo del torero, tuvo su momento en el comienzo de faena de muleta entre Vicioso, el 5º de la tarde, y el rubiales Javier Jiménez. Acoplamiento que puso a todo el mundo de acuerdo y que llevaba como tarjeta de presentación el brindis que el chaval de Espartinas formuló como pésame por Félix de Luis a todo Lodosa a través de su alcalde, Pablo Azcona. Lo mejor de la tarde lo estropeó Jiménez con la espada. El resto del festejo deparó puestas en escena cómodas por la boyantía y escaso motor de los animales corridos. Con una oreja para Jiménez del 2º, el resultado de la emoción hubiese sido más justo.
Fuente:noticiasdenavarra.com
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