Según han informado a Efe fuentes próximas al banderillero, su cadáver se encuentra en el Hospital del Perpetuo Socorro de Albacete y las causas de su muerte están bajo secreto de sumario.
La Subdelegación del Gobierno en la provincia de Albacete ha confirmado la muerte del banderillero, sin aportar más detalles.
"Como banderillero y como persona era muy querido en Albacete porque era muy buena persona", han destacado las mismas fuentes, que han apuntado los "problemas personales" que tenía el fallecido.
Manuel Montoya Murillo fue novillero destacado en los comienzos de su carrera e incluso llegó a tomar la alternativa antes de pasarse a las filas de los de plata, habiendo ejercido como subalterno en las cuadrillas de varias figuras.
Sin antecedentes taurinos familiares, Montoya, que había nacido en Albacete el 21 de noviembre de 1972, ingresó a muy temprana edad en la Escuela de Tauromaquia de aquella capital.
Vistió su primer traje de luces en público a los dieciséis años, el 10 de agosto de 1988, en la localidad albaceteña de Alcalá de Júcar.
Sus primeros pasos como becerrista, actuando en casi todas las plazas de su provincia, fueron tan prometedores que llegó a estar respaldado por José Antonio Martínez Uranga, actual empresario de la plaza madrileña de Las Ventas que entonces lo era también de Albacete.
Su debut con picadores tuvo lugar el 5 de agosto de 1989, en Lorca (Murcia), compartiendo cartel con Francisco José Ruiz Román "Espartaco Chico" y Julio Aparicio.
Desde ese año, y hasta 1991 Montoya se forjó como uno de los novilleros con más proyección de su provincia donde siempre ha habido una importante cantera de aspirantes a torero.
En su palmarés como novillero destacan dos triunfos en la feria de novilladas de Algemesí, donde fue triunfador en las ediciones de 1989 y 1990, las dos orejas que cortó a un novillo de Fernando Domecq el 1 de abril de 1991 en Arles (Francia) y, sobre todo cuando el 20 de mayo de ese mismo año consiguió indultar en Nimes (Francia) un novillo de Salvador Guardiola, de nombre "Peleón".
El parón obligado por el servicio militar que tuvo que cumplir a partir de 1992 hizo que bajaran sus contrataciones de forma significativa.
Y ya a duras penas retomó la carrera, pero con mucho menos ambiente. Aunque llegó a cumplir el sueño de todos los que empiezan: tomó la alternativa el 21 de agosto de 1996, en Cuenca, apadrinado de manos de Ricardo Agüin "El Molinero" y en presencia de José Pacheco "El Califa", con toros de "El Pizarral".
La falta de oportunidades finalmente le empujó al escalafón de los de plata, y fue en 2003 cuando cambió la espada y la muleta por el capote de brega y las banderillas, debutando como banderillero a las órdenes de su paisano Dámaso González.
Además de Dámaso, otros toreros a los que ha acompañado en sus cuadrillas Montoya han sido Luis Francisco Esplá, José María Manzanares (padre), el colombiano César Rincón y, más recientemente César Jiménez y Rubén Pinar, torero este último con el que estaba toreando esta temporada. Fuente: adn.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario