jueves, 15 de septiembre de 2011

ALBACETE. VIDEO Y CRÓNICA DE LA CORRIDA DE TOROS DEL MIÉRCOLES 14 DE SEPTIEMBRE 2011. Grave cogida de Gimeno Mora


14/09/11 Sebastián Castella, oreja en Albacete from MEDIAVERONICA

14/09/11 Miguel Tendero, oreja en Albacete from MEDIAVERONICA

14/09/11 Miguel Ángel Perera, oreja en Albacete from MEDIAVERONICA

Grave cogida de Gimeno Mora en Albacete from MEDIAVERONICA

14/09/11 Parte médico de la cogida de Gimeno Mora en Albacete from MEDIAVERONICA on.

Toros
Se lidiaron cinco toros de Albarreal, desiguales de presentación, varios anovillados, descastados y sin clase tercero, quinto -pitado en el arrastre- y sexto, nobles y manejables segundo y cuarto, y uno de Luis Algarra, en primer lugar, manso, pitado en el arrastre.

Toreros
Sebastian Castella, pinchazo y estocada trasera y caída (silencio tras aviso) y estocada (una oreja).
Miguel Ángel Perera, estocada caía (una oreja) y estocada trasera y atravesada (ovación).
Miguel Tendero, pinchazo arriba y estocada (una oreja) y cinco pinchazos y dos descabellos (silencio).


Incidencias
Tres cuartos de entrada en tarde soleada.
En la enfermería, Gimeno Mora, fue asistido de una herida por asta de toro con dos trayectorias, una de 30 centímetros y otra de 40. Pronóstico muy grave.

Reproducimos la crónica que realiza D. Pedro J. García para latribunadealbacete.es, sobre este festejo.

Tendero pisó con firmeza y las figuras pasaron de puntillas

Tarde fría en lo taurino, con uno oreja por coleta para los diestros, y espeluznante con la cogida que sufrió el banderillero Gimeno Mora, quien fue prendido por el tercero de la tarde, a la salida del tercer par de banderillas y sufrió una dura cornada, con dos trayectorias, de pronóstico muy grave. Tarde triste para los de plata, quienes también tienen su protagonismo positivo, como José Gutiérrez y Guillermo Barbero, quienes se desmonteraron tras banderillear al quinto de la tarde, recibiendo una ovación que, seguramente, ellos dedicaron a su compañero que estaba en la enfermería.
El cuanto a los de oro, otra tarde con dos figuras, y otra decepción para el aficionado, que no para el público, que, según lo visto, parece que disfrutó con la primera faena de Perera -hasta hubo petición de la segunda oreja, que con buen criterio no concedió el presidente- y la segunda de Castella, dos figuras y los dos pilares de la Feria de Albacete, ambos anunciados dos tardes, que ayer pasaron de puntillas por la plaza ante un encierro que no se comía a nadie.
Por contra, el albaceteño Miguel Tendero pisó con firmeza ante el peor lote y dos toros complicados. Al primero de su lote, un astado sin fijeza y suelto en los primeros tercios, Tendero le planteó una faena de entrega y mando, enganchando al astado y dejándole la muleta en la cara para que repitiese, en series cortas, pero de mano baja y toreando hacia dentro. Aprovechó lo mejor del toro con la derecha y, al natural, al astado le costó más y ligó dos de buen corte, pero el astado se rajó a mitad de faena y, ya junto a tablas, un valiente Tendero consiguió mantener intensidad en su quehacer, rematado con un pinchazo arriba y una estocada, que le valieron para cortar una oreja.
Peor condición tuvo su segundo enemigo, sin ninguna clase, sin humillar y sin entrega, aunque el diestro consiguió hilvanar series cortas a media altura, sobre todo con la derecha, ya que al natural le costó más tomar la muleta y se colaba. En la recta final, más en la distancia corta, estuvo firme, aunque muy desacertado con los aceros, ante un toro que echaba la cara arriba y no pasada. El diestro albaceteño pinchó en cinco ocasiones y necesitó de dos descabellos para acabar con el toro.
Las figuras. Miguel Ángel Perera completó su segunda tarde en la Feria de Albacete y el balance final es el de una oreja cortada. Ante el primero de su lote, un toro noble y manejable, se vivió un inicio de faena esperanzador, con dos pases cambiados, como si se quisiera desquitar de la primera tarde, pero fue un espejismo, ya que con la derecha, su toreo en redondo en sucesivas series fue poco ajustado y ceñido, enganchando al toro en cada muletazo en Albacete y despidiéndole en Murcia. Peor estuvo al natural, aunque supo calentar los tendidos con el arrimón final, muy valiente en la cara del toro y consiguiendo que el astado pasase en un palmo de terreno. Dejó una estocada caída que sirvió para que el público le pidiese las dos orejas, aunque el usía valoró que con una era suficiente. Ante el quinto obsequió al respetable con una faena aburrida, sin temple ni mando y nuevamente muy aliviado.
Castella lo intentó con el manso de Luis Algarra que saltó al ruedo en primer lugar, con firmeza ante un toro con peligro, pero con que el poco pudo sacar y al que costó cuadrar para entrar a matar, por lo que llegó a escuchar un aviso y su faena se silenció.
Con el anovillado cuarto, lo más lucido fue el quite por chicuelinas y el inicio de faena por estatuarios, ya que después se sucedieron las series en redondo con poco temple y calado, toreando también hacia fuera y con demasiados enganchones. Apostó, como Perera en el segundo, por un final más encimista que también le valió para cortar una oreja. Veremos qué pasa mañana.

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